Tanto tiempo estuve tratando de evitarlo, de no engancharme y seguir siendo sólo yo en mi vida. Pero uno no puede luchar por siempre contra lo inevitable. Siento algo raro en mi cuerpo, mi estómago siente cosquillas y en mi cabeza no dejan de aparecer imágenes de el. Mi cara bota más sonrisas de las que yo alguna vez imagine. Y mis manos siempre buscan las suyas cuando estamos juntos.
Pero aún así no le pude decir que lo amo, incluso cuando lo siento así desde hace mucho. No se porque no pude sacarlo de mi boca y decírselo cuando el me lo dijo a mi. Y es que siento que a veces tengo tantas ganas de no sentir y controlarlo todo que reprimo tanto mis sentimientos que ya me cuesta aceptarlos.
Tengo miedo que las cosas cambien, que lo este empujando a alejarse de mi. Y que el ya no sienta lo mismo. Tengo miedo de haberlo destrozado, de haber dañado su corazón y loca su cabeza.
Aquí voy otra vez, con insomnio a las cuatro de la mañana. Y es que no puedo dormir cuando esas dos simples y cortas palabras retumban en mi cabeza y en mi corazón, traspasaron mi alma. Y mi cuerpo lucha por no sentirlo porque en el fondo tiene miedo que lo hieran de nuevo. Espero me logre entender, tenerme paciencia. Y es que me cuesta mucho explicar mediante mi voz y mirarlo a los ojos cuando siento vergüenza por lo que me pasa adentro...
No hay comentarios:
Publicar un comentario